viernes, 11 de julio de 2008

Julio Cortázar

Compré en el subte unos folletos abrochados con textos... este es uno


Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj
Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.

3 comentarios:

Vicki dijo...

I made three batches of jam, so there is plenty, all you need to do is come and get it!!! My daughter Jessi wants some too. She is a nurse in the Dominican Republic. We are going to visit her in September, I hope to take her some jam when I go.

Vicki dijo...

I know our students from Central America have problems getting visas, but I didn't know it was the same from Argentina. Is it hard to get a visa to travel to Europe?

Anónimo dijo...

Si, es muy lindo me lo mostraste una vez. tE AMO